Cambio dirección para afianzar mi domicilio.
Tomo el volante y refuerzo mi rumbo.
Se fue moviendo el motor, la estación, el piso
y en cada nueva posición, me sacudo.
Pedí compartir para conocer mi soledad
y acercarme a un modo temporal mucho más justo.
Llevo nuevas llaves en el bolso,
es mi puerta de esperanza y amor agudo.
*
No hay comentarios:
Publicar un comentario