*
Acto de agradecer y de amar,
círculo de fuego
en el espacio en el que estás,
a la música del alma
que cobija el viento
en el silencio.
Acto de ampliar
y dejar pasar
el agua de la vida
en su misterio.
Arroja Sebastián cada minuto
y continúa, el guerrero,
caminando hacia el horizonte
liviano y eterno.
*
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