domingo, 17 de abril de 2022

Caigo

Caigo después de haber crecido. Tanto sol que me hizo verde y alta jugosa estirada arremetida.

Caigo, meciéndome en el aire con el vaivén de quienes tenemos miedo, dudamos y también soñamos.

Ya dejo de latir junto a la rama que me dio su sabia y me voy a cantar con antiguas melodías del viento. 

No busco llegar lejos. Caigo y espero. El frío me llevará a crujir junto a otras hacedoras del otoño, mientras enciende los chispazos guardados y el brillo de las alacenas. 

Mis palabras serán curvas pronunciadas por mis marrones amarillos y las nervaduras abiertas hasta la ceniza. Y cuando se encuentre la pisada animal con el abrigo de los suelos, resurgirá la orquesta hojarascal de mi propia voz.

El silencio será pronto el rumbo fértil. Me brindaré por fin a otra caída: el abrazo que la tierra hace en cada estación a sus semillas.


Producción en el taller de literatura del Frente de Artistas del Hospital Borda

No hay comentarios: